Rocket Lab, una empresa de tecnología y lanzamiento espacial, puso en órbita con éxito hoy el satélite de radar QPS-SAR-14, apodado Yachihoko-I. El lanzamiento, que marca la sexta misión de la empresa japonesa de imágenes de la Tierra iQPS, se llevó a cabo desde el sitio de lanzamiento de Rocket Lab en Nueva Zelanda.

Ampliación de las capacidades de observación de la Tierra

El cohete Electron que transportaba el Yachihoko-I despegó a las 14:51 horas. EST (1951 GMT; 8:51 am hora local de Nueva Zelanda). Aproximadamente 50 minutos después del lanzamiento, la etapa de patada del Electron desplegó el satélite en una órbita circular a 357 millas (575 kilómetros) sobre la Tierra. Esta última incorporación se unirá a la constelación iQPS-SAR existente, ampliando significativamente los servicios globales de monitoreo de la Tierra.

Los satélites de la constelación iQPS utilizan tecnología de radar de apertura sintética (SAR). SAR permite a los satélites crear imágenes de alta resolución de la superficie de la Tierra, incluso en condiciones nubladas o durante la noche. Esto contrasta con las imágenes ópticas tradicionales, que requieren cielos despejados y luz solar.

Construyendo una constelación integral

iQPS tiene planes ambiciosos para construir una constelación de 36 satélites SAR. Su objetivo es proporcionar imágenes casi en tiempo real de toda la Tierra, capturadas cada 10 minutos. Yachihoko-I representa un paso crucial hacia el logro de este objetivo. Es el decimotercer satélite iQPS que alcanza con éxito la órbita. En particular, siete de estos satélites (incluidos algunos de los miembros iniciales de la constelación) han sido lanzados en otros cohetes, como el vehículo de lanzamiento de satélites polares de la India, el Epsilon de Japón y el Falcon 9 de SpaceX.

Denominación de misiones y progreso de Rocket Lab

El nombre “Yachihoko-I” se inspira en el dios japonés de la construcción de naciones y refleja el propósito del satélite de proporcionar valiosos datos de observación de la Tierra. En consecuencia, la misión recibió el nombre de “La nación que Dios navega”.

Este lanzamiento representa un hito importante para Rocket Lab, siendo su lanzamiento número 16 en 2025 y el número 74 en general. La mayoría de estos lanzamientos se han realizado utilizando su cohete Electron, que mide 18 metros (59 pies) de altura. Rocket Lab también opera una versión suborbital del electrón, llamada HASTE (Electrón de prueba suborbital del acelerador hipersónico). HASTE ha completado cinco vuelos de prueba exitosos desde su debut en junio de 4023.

El despliegue continuo de estos satélites y la expansión de las capacidades de lanzamiento de Rocket Lab subrayan la creciente importancia de la tecnología de observación de la Tierra para una variedad de aplicaciones, desde la respuesta a desastres hasta el monitoreo ambiental.

El exitoso lanzamiento de Yachihoko-I demuestra el desempeño constante y el papel vital de Rocket Lab en el apoyo al desarrollo de capacidades de observación de la Tierra en todo el mundo. Destaca una tendencia creciente hacia constelaciones de satélites que proporcionen un seguimiento continuo y detallado de nuestro planeta.